La suspensión de actividades culturales o fiestas tradicionales en la región Junín, sigue afectando la reactivación económica de los artesanos que se dedican a la elaboraciónde vestuarios, mascarillas, zapatos y otros, quienes todavía no pueden recuperarse de la pandemia de la COVID-19.
La suspensión de actividades culturales como La Morenada de Chongos Bajo, Viques, Chinchilpos y Gamonales de Huayucachi, Negritos de Ingenio, Chupaca, incluso la Tunantada de Jauja, terminó perjudicando a los comerciantes y artesanos que se dedican a la elaboración de máscaras, botas, vestuarios y otros que se utilizan en estas festividades.
Luego de la pandemia, los materiales que utilizan los artesanos, también incrementaron sus precios. Lucía contó que antes trabajaba con préstamos de 10 mil soles, para una campaña, ahora tiene que invertir más.