La tecnología que hoy domina el interés de la gente, las investigaciones y las millonarias inversiones es la IA. Por ejemplo, solo OpenAI acaba de recaudar 40 mil millones de dólares para el desarrollo de sus modelos.
Cada vez hay más empresas incursionando en esta tecnología, que se basa en algoritmos. Está en el campo de la informática y su funcionamiento depende datos.
Casas detalló que la IA podría ayudar a la Policía a tomar mejores decisiones en la persecución de organizaciones criminales, como los extorsionadores.
“Te va a permitir identificar un patrón de comportamiento, un patrón de desplazamiento, un patrón de geolocalización”, indicó. Es decir, se podrá mejorar la investigación policial que sustente la carpeta fiscal y no se libere a delincuentes por ausencia de pruebas.
En negocios y buses
El transporte público es víctima de la extorsión y de sicarios. Como recomendación, el especialista en seguridad indicó que se puede aplicar métodos como videocámaras o botones de riesgo. Lamentablemente, los buses están en un mercado informal y precario.
“Lo ideal sería que estén debidamente interconectados, como para poder auxiliar en los momentos en que pueda ocurrir un hecho delictivo”, explicó Casas. Y en el caso de los botones de riesgo podría dar aviso al patrullaje integrado del serenazgo y la policía.
Otra opción es la videocámara. Muchos buses ya integran esta tecnología que “sí suma a la investigación posterior a que se haya cometido un delito”.
En lo que se refiere a locales como farmacias, bodegas, tiendas, que también son víctimas de ladrones y extorsionadores, además de los anteriores métodos se puede aplicar formas disuasivas como las alarmas. “Hoy en día se ha puesto de moda mucho el tema del humo concentrado, el humo blanco que puede cegar”, indicó.
Es así como la tecnología puede contribuir en la lucha contra la delincuencia. Ahora hace falta ponerla en práctica.